Cómo puedes mejorar el aislamiento de tu casa
El aislamiento en una casa es un aspecto muy importante a tener en cuenta, ya que no sólo mejora el confort y bienestar de las personas que viven en ella, sino también aumentará la eficiencia energética y el ahorro en los costos de energía.
Un buen aislamiento puede ayudar a mantener la temperatura en el interior de la vivienda, proteger de los ruidos externos y reducir la cantidad de humedad en el aire, por ejemplo.
En este artículo desde European Acústica te señalaremos los diferentes factores que puedes considerar para mejorar el aislamiento en tu casa, no te los pierdas.
Evaluar el estado actual del aislamiento en la vivienda
Lo primero a realizar es evaluar el estado actual del aislamiento en la vivienda. Para ello, hay que revisar el estado de las ventanas y puertas, asegurándote de que estén cerradas y selladas correctamente. También es importante revisar el aislamiento en las paredes y techos.
Si tu vivienda es antigua, es posible que no tenga el aislamiento adecuado, lo que puede causar una pérdida significativa de calor en invierno y un aumento de la temperatura en verano, además de producirse problemas por el ruido interno y externo.
Mejorar el aislamiento de las ventanas
Como ya adelantamos, una forma sencilla de mejorar el aislamiento en tu casa o vivienda es asegurarte de que las ventanas estén selladas correctamente.
Para ello, revisa las juntas de goma y reemplázalas si están desgastadas o dañadas. También puedes aplicar silicona en las áreas donde haya grietas o fisuras para evitar fugas de frío o calor y entrada o salida de ruidos.
Además, considera la instalación de vidrio de doble acristalamiento, ya que esto puede reducir significativamente la cantidad de calor y ruido a través de las ventanas.
Para una información más detallada sobre el aislamiento en ventanas puedes informarte aquí.
Mejorar el aislamiento de las puertas
Las puertas también son una fuente común de pérdida de calor, entrada de aire frío en la vivienda y ruido exterior nada agradable.
Para mejorar el aislamiento de las puertas, asegúrate de que estén bien ajustadas y selladas.
Si hay espacio entre la puerta y el marco, puedes instalar burletes o sellos de goma para reducir la cantidad de aire que entra.
Además, considera la instalación de puertas con núcleo de espuma, ya que ofrecen un mejor aislamiento.
Aislar las paredes y techos
La mayoría de las casas antiguas no tienen el aislamiento adecuado en las paredes y techos. Si este es el caso en tu vivienda, considera la posibilidad de instalar aislamiento acústico/térmico en las paredes y techos.
El aislamiento puede ser en forma de paneles, rollos o espuma. Si optas por la instalación de paneles, asegúrate de que sean de un grosor adecuado para tus necesidades y que se ajusten correctamente.
Si prefieres la instalación de rollos, elige un grosor adecuado para tu vivienda y asegúrate de que estén instalados de manera uniforme.
Si eliges la espuma, asegúrate de que se aplica de manera uniforme y que no haya áreas sin aislamiento.
Considerar la instalación de techos verdes
Los “techos verdes” son una forma efectiva y ecológica de mejorar el aislamiento en tu vivienda, especialmente si vives en una zona urbana. Los techos verdes pueden reducir el calor en el verano y mantener el calor en invierno.
Además, pueden ayudar a reducir la cantidad de lluvia que llega a las alcantarillas, mejorar la calidad del aire y proporcionar un espacio decorativo único en el lugar.
La instalación de un techo verde requiere de una capa impermeable y un sistema de drenaje adecuado, además de la capa de sustrato y la vegetación en sí misma.
Por eso, es importante contratar a un profesional para instalarlo y asegurarse de que se sigan los procedimientos adecuados para evitar problemas de filtración.
Identificar y sellar las áreas donde se filtra el aire y el ruido
Las áreas donde el aire y ruido entra y sale de la casa o vivienda son también una cuestión muy común en las viviendas.
Por eso, hay que identificar las áreas donde el aire o el ruido puede estar entrando, como por ejemplo las grietas alrededor de los marcos o cercos de las ventanas o las puertas, y luego proceder a sellarlas.
En ese caso se pueden utilizar selladores de silicona o de espuma para cerrar las grietas y prevenir la entrada de aire frío y el molesto ruido exterior en el lugar.
Revisar la instalación del sistema de calefacción y aire acondicionado
La instalación del sistema de calefacción y aire acondicionado también puede afectar al aislamiento de tu vivienda. Asegúrate de que los conductos estén sellados adecuadamente para evitar la pérdida de aire caliente o frío.
También es importante asegurarse de que el sistema esté funcionando correctamente y de que se esté haciendo el mantenimiento adecuado para garantizar su eficiencia.
Considerar el aislamiento en el ático
¿Tienes un ático en tu vivienda? Entonces debes saber que, si tu ático no está aislado adecuadamente, es posible que estés perdiendo una gran cantidad de calor y además el ruido podrá entrar o salir por esa estancia.
Asegúrate de que el aislamiento en el ático sea el adecuado, y de que no haya zonas sin aislar. Si es necesario, considera la contratación de personal especializado.
Conclusión sobre el aislamiento en una vivienda
En conclusión, mejorar el aislamiento en tu vivienda es una forma muy efectiva de aumentar el confort y bienestar en el hogar, al mismo tiempo que se reduce el consumo de energía y se ahorra en los costes de energía.
Al evaluar el estado actual del aislamiento en tu vivienda, mejorar el aislamiento de las ventanas y puertas, aislar las paredes y techos, considerar la instalación de techos verdes, identificar y sellar las áreas donde se filtra el aire, asegurarse de que el aislamiento en el ático sea adecuado y revisar la instalación del sistema de calefacción y aire acondicionado, sin dudas puedes mejorar significativamente el aislamiento de tu vivienda.
Si tienes dudas sobre cómo mejorar el aislamiento de tu casa o vivienda, te recomendamos que nos consultes a European Acústica para ayudarte a tomar las mejores decisiones.
¿A qué esperas?